Condiciones favorables para una buena muda
Las plumas van creciendo con un ritmo constante hacia el exterior en dónde secan y maduran su estructura.
Un ambiente con humedad moderada y bien ventilado es importante en este periodo para evitar un secado demasiado rápido. Por otra parte la falta de ventilación provocará que la urea eliminada en las heces fermente, incrementando el malestar de los pájaros e incluso reduciendo su apetito. Además de todo esto, la consecuente falta de higiene en un aviario.
La exposición al sol puede acelerar el secado si es en exceso, en el caso de que la muda se realice en interior no hay que olvidar aportar vitamina D, responsable de la síntesis del calcio, básico durante la muda, por lo que nuestros pájaros deberán tener siempre a su disposición un hueso de jibia, y arena o grit en el fondo de la jaula . El sol en exceso también propicia el apagado del brillo en el plumaje.
Mantener separados a machos de hembras y pichones de adultos, rebaja notablemente el estrés, y evita la copia de la canción en los pichones de la temporada. Otro factor para reducirlo es proporcionar el alojamiento más confortable posible, con el espacio suficiente para todos los individuos, personalmente a los ejemplares adultos los tengo dentro del cajón durante la muda, tranquilos, aunque es importantes proporcionarles baños.
Los baños son imprescindibles, ayudan a humedecer las fibras de queratina y proporcionan elasticidad, resultan refrescantes a la vez que damos a nuestros compañeros oportunidad de higiene, tanto para ellos como para nosotros mismos. La piel, además, requiere del agua para mantenerse elástica y permitir que la pluma despunte, caso contrario podría provocarse un "quiste" dejando la pluma o plumas crecer por debajo de la piel.
El agua del bebedero ha de renovarse todos los días, es conveniente acostumbrar a los pájaros a bañarse lejos del bebedero, y esto se puede solucionar soplando unas cascarillas en el agua.
Extremar las precauciones para evitar los contagios por hongos. Las condiciones no pueden ser más favorables para estos: calor y humedad.
Los cambios en las dietas nunca resultan beneficiosos, debemos establecer una dieta para toda la campaña y mantenerla, una cambio podría facilitar la colonización de gérmenes patógenos.
Extremar las precauciones con las frutas y verduras, es momento de fumigaciones en los cultivos, por lo que una limpieza escrupulosa de estas nos puede evitar algún susto.